Las compañías de financiamiento desembolsaron $406.125 millones en esta línea, según la Superfinanciera. En mayo, Tuya y Giros & Finanzas lideraron este nicho
Las compañías de financiamiento son conocidas como establecimientos de crédito, las cuales están en la capacidad de captar dinero del público y otorgar préstamos, sin ser bancos.
Esta semana, Nequi, la plataforma financiera digital del Grupo Bancolombia que hoy cuenta con 13 millones de clientes, recibió la autorización por parte de la Superintendencia Financiera de Colombia (SFC) para constituirse como compañía de financiamiento. Con esto, se suma a RappiPay, que hace menos de tres meses logró el mismo objetivo, y a Nu Colombia, que solicitó esta conversión también.
“Esta es una noticia positiva en nuestro proceso de separación legal y un hito jurídico muy importante. Es uno de los pasos que debemos dar para poder comenzar nuestra operación como una nueva compañía de financiamiento, legalmente diferenciada de Bancolombia S.A.”, manifestó Andrés Vásquez, director de Negocio de Nequi, quien precisó que aún deben continuar el trámite para poder operar de forma independiente.
Si bien cada empresa se concentra en un sector diferente de las finanzas, nueve de las 11 compañías de financiamiento otorgan créditos de consumo, lo que convierte a este producto en el más común. Según el más reciente reporte de la Superfinanciera, en mayo desembolsaron 28.885 títulos de este tipo, por $406.125 millones.
Allí, Tuya encabeza la lista, con 8.912 entregas por $92.892 millones y una tasa promedio de 28,03%; le sigue Giros & Finanzas, con 8.107 por $34.971 millones y una tasa de 23,84%; y Coltefinanciera con 4.957 desembolsos por $23.772 millones y una tasa promedio de 24,75%.
Es de destacar que una compañía de financiamiento comercial suele asumir un riesgo más alto, “al otorgarle préstamos a personas que muchas veces no cumplen los requisitos mínimos que un banco sí solicita. Sin embargo, al tomar este riesgo debe encontrar una forma de asegurarse. Por eso en ocasiones solicitan letras, títulos o incluso un inmueble como garantía”, explicó Scotiabank Colpatria.
Pero, ¿a qué se debe que grandes empresas quieran ser compañías de financiamiento? Las licencias de estas entidades y las de un banco son totalmente equivalentes en regulación, supervisión y campo de acción.
No obstante, “a nivel normativo la única diferencia que persiste es que los bancos pueden tener cuenta corriente y las compañías no, y el capital mínimo de arranque de una compañía es mucho menor. La licencia de compañía como la de un banco es muy versátil y con una fuente de fondeo estable del público permite ampliar el portafolio de servicios, incluyendo los servicios digitales que son fáciles de usar, de menores costos y más fácil acceso. Hay compañías que ya operan 100% digital como neobancos y cada una en sus distintos segmentos de negocio los están ofreciendo”, explicó Clara Escobar, presidente de la Asociación de Compañías de Financiamiento (Afic).
En cuanto a los montos de capitales mínimos para 2022, las entidades bancarias necesitan $107.849 millones, mientras que las compañías de financiamiento requieren $27.789 millones, sin embargo, cada año se incrementan estas cifras.
Fuente: La República