El silencio ante el asesinato de Sara evidencia la indiferencia de líderes, medios y colectivos. La transfobia persiste, mientras que la gente sigue callada
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Es desolador que la magnitud de los hechos ocurridos ayer y documentados a nivel nacional e internacional, no hayan sido de interés para supuestos “líderes” y “lideresas” progresistas y de otras colectividades que incluso han sido elegidos erróneamente por voto popular (enfatizando aquí en la poca representación que están teniendo los ideales del Pacto Histórico en Madrid gracias a la idea de mantener un modelo de lista cerrada para que hubiera Concejales a dedo y no por mérito individual; detonando así en Concejales elegidos sin la suficiente capacidad moral, intelectual y política para desarrollar los proyectos de la Colombia Humana, esa que muchos soñamos alguna vez, pero que hoy no es más que una vaga utopía gracias a esos reprochables “líderes” y “lideresas” que utilizan el poder a su conveniencia, y que por andar llevando una vida de lujos, de “parches” y viajes, que a la final se convierten en algo personal, han olvidado la colectividad que se supone deben representar).
Mientras en otras regiones del país y en algunas esferas de activistas se organizaban, discutían y proponían acciones y marchas en contra del vil asesinato de Sara, en mi municipio el silencio ha brillado por su ausencia entre los flamantes líderes, los políticos, los funcionarios, los creadores de contenido, los supuestos artistas, los medios amarillistas y serviles de la región y los demás colectivos que podrían tomar acción directa. No obstante, han optado por omitir el tema y ni siquiera mencionarlo en sus perfiles de Facebook e Instagram, entre otras redes sociales, aún cuando su tráfico en redes es elevado y sus publicaciones diarias alcanzan un número altísimo de reacciones, comentarios y vistas
No quisiera debatir ni polemizar con los grupos feministas que se han formado en la sabana de occidente, lo cual está bien en una sociedad tan históricamente machista y feminicida, pero ocurre que se ha percibido el vacío de su silencio ante el homicidio cruel y despiadado de una mujer trans indefensa. Y bueno, de las casi tres decenas de asesinatos que han ocurrido en este 2025 hacia personas de la comunidad LGTBIQ+.
Así que evitando personalismos o alusiones desacertadas esta crítica va para la sociedad colombiana en general, pues resulta bastante farsante y maniqueista luchar y exigir sólo por ciertas causas, mientras se desconocen otras más graves y latentes como ocurre con la transfobia y la negación de nuevos géneros, entre muchas más represiones que siguen existiendo, en parte, gracias al corrosivo silencio.
Hoy mi apoyo se encamina hacia los marginados… Hoy mis oraciones van hacia las 24 personas LGTBIQ+ asesinadas en Colombia en lo que va del 2025… Hoy mi clamor es porqué haya líderes y sociedades más sensibilizadas dónde prime la fraternidad y no el caos, donde reine la igualdad y no la represión, dónde impere el bienestar colectivo y no el de unos pocos acomodados…
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