Mientras la tecnología avanza para ayudar a la ciudanía en sus labores y en la ciencia, la Unión Europea, estaría vetando esta nueva generación que se esta implementando al impedir que las cámaras de seguridad no realicen el reconocimiento facial de las personas en espacios públicos.
El día de ayer, se dio a conocer que la Unión Europea estaría en contra de la llamada “hipervigilancia”, o el denominado ‘Gran Hermano’ que lo sabe todo por medio de cámaras y que en casos donde se presenten crisis sociales se puedan identificar las personas que cometan actos delictivos, manifestando que lo que “se busca evitar que se atente contra los derechos de los ciudadanos”.
Esto ha generado varias opiniones divididas entre quienes están de acuerdo, afirmando que es propio de países autoritarios y quienes aseguran que es necesario para la seguridad ciudadana.
Ante esta confrontación sobre la tecnología del reconocimiento facial, Idoia Salazar, presidente de OdiseIA, experta en ética y miembro del equipo de expertos del Observatorio de Inteligencia Artificial del Parlamento Europeo, hablo en La Hora del Regreso, y comentó que esto sería un temor por el uso de datos que se pueden generar en las cámaras para cometer delitos que van más allá de la seguridad y atentar contra la vida de las personas.
“se ha propuesto la prohibición del uso de inteligencia artificial por parte del Estado y de las administraciones públicas. De manera que los gobiernos no podrán tener el control de la población por medio de estos sistemas”.
Además, explicó que esta tecnología sí podrá ser utilizada por los gobiernos europeos, pero bajo estrictos y medidos momentos: “En algunas ocasiones en las que se presente una posible amenaza masiva para la población, como un evento terrorista, se permitirá el uso de esos sistemas de seguridad, pero será determinado por un juez que se asegurará que sea usado por un tiempo limitado y en un lugar definido”.