La alergia a la penicilina es una reacción del sistema inmunitario que ocurre cuando este responde de manera excesiva a los antibióticos relacionados con la penicilina. Es importante señalar que muchas personas creen tener esta alergia, pero en realidad pueden haber experimentado efectos secundarios en lugar de reacciones alérgicas.
Riesgos
Las reacciones alérgicas graves pueden ser mortales. Aumentan las posibilidades de tener estas reacciones si has tenido:
- Un resultado positivo en pruebas de alergia.
- Urticaria rápida tras tomar penicilina.
- Reacciones adversas previas a este medicamento.
Si solo has presentado salpullido tardío, es menos probable que seas alérgico.
Síntomas
Los síntomas pueden variar:
Reacciones leves:
- Salpullido.
- Urticaria.
- Comezón en la nariz o la boca.
Reacciones graves (anafilaxia):
- Urticaria extensa.
- Hinchazón de la garganta, labios o lengua.
- Dificultad para respirar.
- Desmayos.
- Dolores abdominales, náuseas o diarrea.
Las reacciones graves generalmente ocurren poco después de tomar el medicamento, aunque también pueden aparecer más tarde.
Diagnóstico
Para diagnosticar la alergia, el médico evaluará tus síntomas y podría realizar pruebas cutáneas y administrar dosis pequeñas de penicilina mientras te observa.
Tratamiento
El tratamiento principal es dejar de tomar el medicamento. Las reacciones leves pueden tratarse con antihistamínicos. Si la reacción es grave, se puede necesitar una inyección de epinefrina.
Cuidados en el hogar
Evita la penicilina y asegúrate de que tus médicos sepan sobre tu alergia. Si estás en riesgo de reacciones graves, ten siempre a mano una inyección de epinefrina y verifica su fecha de caducidad.
Nota: Esta información no sustituye el consejo médico y debe ser verificada con profesionales de la salud.