La Real Academia Sueca de Ciencias finaliza este lunes su ronda de entrega de premios Nobel y el turno final corresponde al de Economía. El premio Sveriges Riksbank en Ciencias Económicas en memoria del químico e ingeniero sueco, Alfred Nobel, tiene a cinco contendientes en el marco de la entrega 57 de este reconocimiento.
Clarivate, empresa de servicios enfocados al análisis de datos de investigación científica y académica y que predijo la victoria de 83 candidatos en distintas categorías, puso la mira en David Autor, estadounidense de 58 años; Lawrence F. Katz, estadounidense de 66 años; Marienne Bertrand, belga de 55 años; Sendhil Mullainathan, indio de 52 años; y Nicholas Bloom, británico-estadounidense de 52 años. Los cinco favoritos son doctores en economía y aspiran a quedarse con el Nobel desde tres ángulos diferentes.
El primer enfoque es el salario y la desigualdad, área de estudio de David Autor con su análisis de la estructura salarial, la desigualdad de ingresos, el avance educativo y el cambio tecnológico.
Lawrence F. Katz también figura en esta rama de estudio, aunque su investigación se centra en cuestiones relacionadas con la economía laboral y la economía de los problemas sociales. Es coautor, junto con la Nobel de Economía 2023, Claudia Goldin, de ‘La Carrera entre la Tecnología y la Educación’, libro que revisa desigualdad económica en Estados Unidos y el papel del cambio tecnológico y el ritmo de avance educativo en la estructura salarial.
El segundo gran tema de estudio es el impacto de la psicología y la cultura en la economía. En este sentido, destacan Marianne Bertrand, también microeconomista cuya investigación abarca los campos de la economía laboral, las finanzas corporativas, la economía política y la economía del desarrollo.
Allí también aparece Sendhil Mullainathan. Sus investigaciones se centran en las ciencias del comportamiento, la discriminación y la pobreza.
Finalmente, Nicholas Bloom es opcionado a quedarse con el reconocimiento en razón de sus análisis sobre incertidumbre económica. El economista ha estado detrás de la medición moderna de la calidad de la gestión en las empresas y ha destacado su importancia a la hora de explicar las diferencias de productividad entre países.
“El galardonado debe haber hecho una contribución que haya influido profundamente en la forma de estudiar y entender la economía; debe ser alguien cuyo trabajo se vea reflejado en el trabajo de muchos otros, alguien que podamos decir que cambió la disciplina y con ello cambió la sociedad”, comentó César Tamayo, decano de la facultad de Economía de la universidad Eafit.
En cuanto a la representación académica de los candidatos, la Universidad de Harvard fue la que puso la mayor cantidad de aspirantes al premio de economía de 2025, con tres de los aspirantes (Autor, Bertrand y Mullainathan). Por su parte, la universidad de Stanford puso a Nicholas Bloom y Lawrence F. Katz proviene del MIT.
Otros candidatos
Diego Guevara, exministro de Hacienda y Crédito Público, propuso otros dos candidatos que se podrían quedar con el premio por sus contribuciones en el estudio de desigualdades económicas y la unificación de la teoría post-keynesiana, Thomas Piketty y Marc Lavoie.
“Es momento del Nobel para Thomas Piketty. Es respetado en la academia tradicional y sus contribuciones a la desigualdad, junto con Sáez y Zucman, cambian el rumbo de la ciencia. En lo personal creo que el Nobel debería ser para Marc Lavoie de la Ubi de Ottawa por sus contribuciones a la unificación de la teoría Post Keynesiana y a los modelos stock flujo. Pero él no está en el radar de los suecos ni de la ortodoxia”, apuntó el exministro Guevara.
Enrique Gilles, profesor investigador del Cesa, agregó que el economista estadounidense Robert J. Barro es otro de los opcionados. “Sus contribuciones a la macroeconomía moderna -en particular al análisis del crecimiento económico, la política fiscal y la teoría de expectativas racionales- han tenido una influencia profunda y duradera en la disciplina”, dijo el docente.
El ganador del premio Nobel de Economía será el 97 en hacerlo desde la primera entrega en 1969. Los ganadores del año pasado fueron Daron Acemoglu, Simon Johnson y James A. Robinson por el análisis sobre la formación de instituciones y cómo afectan a la prosperidad.
Así se escoge al ganador
El proceso para conocer al merecedor del galardón comienza con la nominación de candidatos, a través del Comité Noruego del Nobel. Se trata de cinco intelectuales que desde septiembre del año anterior seleccionan a aspirantes desde distintas áreas.
Luego viene la evaluación de las propuestas. En ellas se tienen en cuenta factores como contribuciones, publicaciones, investigaciones, descubrimientos, logros literarios, proyectos humanitarios, esfuerzos de paz o avances económicos, según corresponda. La evaluación dura meses e incluye a analistas de todo el mundo.