El caos vial es un malestar con el que debe convivirse en las grandes ciudades y, según el más reciente Global Traffic Scorecard 2024, elaborado por Inrix, los conductores de Estambul pierden en promedio 105 horas al año atrapados en el tráfico, lo que la convierte en la ciudad más congestionada del mundo.
Detrás se ubican Nueva York (102 horas) y Chicago (102 horas), seguidas por Ciudad de México, la única de América Latina que aparece en este anti ranking en su versión más actual (ver gráfico).
El estudio, que analiza patrones de movilidad en más de 1.000 urbes, utiliza datos de GPS, sensores y aplicaciones de navegación para calcular cuánto tiempo pierden los conductores en desplazamientos que podrían hacerse en condiciones normales de tráfico.
En promedio, los conductores de las diez ciudades más congestionadas pierden entre 80 y 105 horas al año, el equivalente a más de cuatro días completos sentados frente al volante.
Por qué estas ciudades lideran el ranking
El reporte de Inrix señala que la recuperación económica pospandemia, sumada al crecimiento del parque automotor y al retorno masivo a las oficinas, han devuelto la presión sobre los sistemas viales urbanos.
En Estambul, la combinación de una alta densidad poblacional (más de 15 millones de habitantes), una red vial limitada y un sistema público que aún no logra absorber toda la demanda, explica el primer lugar.
En Nueva York y Chicago, el repunte de la actividad económica, junto con los cuellos de botella en puentes y autopistas urbanas, mantiene los tiempos de viaje por encima de las 100 horas anuales. Ciudad de México sigue mostrando un patrón estructural de embotellamientos por la falta de sincronización semafórica y la saturación de vías principales.
En Europa, Londres y París también figuran en la lista. Aunque cuentan con sistemas de transporte público avanzados, los picos de congestión se concentran en zonas turísticas y áreas de carga y descarga, donde el tráfico comercial y el uso del vehículo privado siguen siendo altos.
El tiempo perdido en los atascos no solo afecta la productividad: también golpea la salud mental y física de los conductores. Estudios citados por Inrix muestran que pasar más de una hora diaria en el tráfico incrementa los niveles de estrés, fatiga y ansiedad, y reduce las oportunidades de descanso y ocio.
Además, el costo económico es elevado. En el caso de Estados Unidos, el tráfico urbano representó en 2024 una pérdida estimada de más de US$70.000 millones, considerando combustible desperdiciado, retrasos laborales y menor eficiencia logística.
El informe concluye que las ciudades que están apostando por infraestructuras inteligentes, zonas de bajas emisiones y mejor gestión del transporte público están comenzando a revertir la tendencia. Ejemplos como Singapur o Ámsterdam —aunque no aparecen en el top 10— demuestran que combinar tecnología, planificación urbana y políticas sostenibles puede reducir drásticamente los niveles de congestión.
Mientras tanto, los conductores de Estambul, Nueva York y Ciudad de México siguen protagonizando la misma escena diaria: una fila interminable de carros, bocinas impacientes y el reloj corriendo más rápido que los vehículos.
¿Y el país?
En Bogotá, por ejemplo, el tráfico no es solo un problema que se genera en horas pico, esta es casi que una compañía permanente para los capitalinos. Y es que desde muy temprano del día hasta entrada la noche, la ciudad se mueve a un ritmo lento, con trancones que pasan a formar parte de la cotidianidad de las personas.
Según otro informe, el TomTom Traffic Index, para recorrer 15 kilómetros en la capital del país por la mañana usted se puede demorar en promedio 49 minutos y 39 segundos, con una velocidad promedio de 18,1 km/h y encontrando una congestión, que lo definen como el tiempo de viaje debido al exceso de tráfico, de 61%. Mientras que por la tarde puede ser de 58 minutos con 43 segundos, una velocidad promedio de 15,3 km/h y una congestión que puede llegar hasta 90%.
Esto se traduce en que, en un año usted puede pasar a conducir 179 horas extra en horas pico, es decir aproximadamente siete días y 11 horas de más.
En este informe agregan que los días donde se presenta un mayor tiempo de viaje son especialmente los martes, miércoles y jueves, llegando a gastarse en un recorrido de 15 kilómetros en el día desde 46 minutos hasta 62 minutos.
Por su parte, los lunes y viernes los tiempos de recorrido entre las 7:00 a.m. y las 6:00 p.m. puede varias desde 42 minutos hasta 58 minutos. Esto quiere decir que entre semana un recorrido que inicia desde las 7:00 a.m. hasta las 10:00 a.m. puede durar en promedio 48 minutos. Mientras que un recorrido entre semana desde las 5:00 p.m. hasta las 7:00 p.m. puede durar en promedio 53 minutos.
En cuanto a la congestión entre semana puede llegar a ser de hasta 99% en los días entre semana desde las 5:00 p.m. hasta las 7:00 p.m. Mientras que en horas de la mañana la congestión puede llegar a ser de 66%.
En cuanto a la velocidad lo máximo que se llega a presentar un día entre semana es 24 km/h, por su parte lo más lento es 15 km/h, en especial en horas de la tarde y de la noche.
En ciudades nacionales, otros informes dicen que Bogotá, Cartagena, Medellín y Cali, con 119, 117, 116 y 113, respectivamente, son las colombianas con más horas perdidas al año por culpa del tráfico. Entre estas la que más alto tiempo en un promedio de recorrer 10km es Cartagena con 31:15 minutos, seguida de Cali con 29:29 minutos, Bogotá con 29:23 minutos y Medellín con 27:42 minutos.