El presidente afgano, Ashraf Ghani, dijo que huyó del país el domingo para “evitar un baño de sangre”, cuando los talibanes entraron en la capital, Kabul, poniendo fin a una ofensiva relámpago.
Combatientes talibanes entraron en Kabul. Tres fuentes talibanas indicaron a la AFP que los insurgentes tomaron el control del palacio presidencial, en el que estaban celebrando una reunión sobre la seguridad en la capital afgana.
“Ahora se enfrentan a una nueva prueba histórica. O bien preservan el nombre y el honor de Afganistán o bien le darán prioridad a otros lugares y redes”, añadió.
Ghani no indicó adónde había ido, pero el grupo de prensa afgano Tolo News indicó que podría haberse marchado a Tayikistán.
Por su parte, el exvicepresidente Abdullah Abdullah, que encabeza el proceso de paz, acusó a Ghani de haberse ido “dejando a la gente en esta situación”.
Tomado de: CMI la Noticia.