Sigue la polémica en el país luego de que el Ejército Nacional reportara que había dado un golpe contundente el pasado 28 de marzo a una organización criminal que opera en el departamento de Putumayo, en el municipio de Puerto Leguizamo, en la vereda de El Remanso, donde murieron 11 personas.
Mientras, algunos pobladores de la zona y defensores de Derechos Humanos han denunciado que el operativo en realidad sería un falso positivo. Aseguran que quienes fueron dados de baja en la acción militar serían líderes y habitantes de la zona.
Pero en las últimas horas el mayor general Eduardo Enrique Zapateiro, comandante del Ejército Nacional, insistió en que se trató de una operación militar contra un grupo de disidentes de las Farc, puntualmente el GAO-r E-48 Segunda Marquetalia (autodenominados Comandos de la Frontera).
Indicó que a este grupo armado disidente se le sindica de asesinar a 13 personas, entre otros hechos criminales, en los últimos dos años, en zona rural del municipio de Puerto Leguizamo, población donde han habido 27 confrontaciones armadas entre los frentes Carolina Ramírez al mando de Néstor Gregorio Vera Fernández, alias Iván Mordisco, y el Comando de Frontera, al mando de alias Iván Márquez.
“Estos grupos criminales no buscan justificar su actuar criminal en una ideología revolucionaria, delinquen de manera híbrida como un cartel del narcotráfico, como un grupo armado residual. Sus comisiones se dedican a fomentar y resguardar los diferentes eslabones de la cadena del narcotráfico”, dijo el mayor general Eduardo Enrique Zapateiro.
Además, aseguró que los subversivos acostumbran a vestir de civil para evitar ser capturados o atacados por la fuerza pública, como según él “ocurrió en la operación” en Putumayo.
“La operación militar se planea porque tiene unos antecedentes históricos muy importantes y es la obligación constitucional actuar en el marco de nuestra misionalidad, esto como una respuesta al llamado de las autoridades del orden nacional, regional y local, así como frente a las acciones criminales que se estaban presentando en esta región del país”, afirmó el mayor general Eduardo Enrique Zapateiro.
Por lo tanto, el oficial dejó claro que nada “fue producto del azar” en medio de esa operación militar en Putumayo, y que fue “planeada doctrinalmente como debe ser bajo el estricto respeto por los derechos humanos”.