En las protestas que se han realizado desde el pasado 28 de abril, en la ciudad de Ibagué, Tolima, Santiago Murillo murió a manos de un Mayor de la policía quien disparó su arma en contra de los manifestantes que se encontraban en el lugar de los hechos, impactando al joven de 19 años de edad.
Ante la gravedad de los hechos, el mayor Jorge Mario Molano Bedoya fue suspendido de sus funciones como policía y posteriormente, un juez lo declaró culpable y lo envió a la cárcel, con la imputación de cargos por homicidio agravado.
Ante las evidencias recolectadas por la fiscalía, se comprobó que el proyectil que impactó al joven quien se encontraba caminando hacia su lugar de residencia, habría sido disparado por el arma del oficial imputado.
Por último, también se conoció que vario s de los testigos que presenciaron el homicidio, manifestaron que al ocurrir el disparo le dijeron a Molano que le prestara los primeros auxilios al joven, pero este hizo caso omiso.