Bangkok, Tailandia – La Policía Real de Tailandia confirmó la detención del ciudadano ruso Georgy Dzugkoev, un conocido vlogger de redes sociales, tras ser sorprendido en plena vía pública manteniendo relaciones sexuales con una prostituta en la parte trasera de una camioneta estacionada.
El incidente ocurrió en la ciudad turística de Pattaya, uno de los puntos más visitados del país por extranjeros, donde las autoridades locales han intensificado los controles tras una serie de episodios recientes que han vinculado a visitantes con actividades ilegales.
Según el informe policial, Dzugkoev fue detenido en flagrancia por agentes de patrullaje nocturno luego de que residentes reportaran movimientos sospechosos en una zona residencial. Al inspeccionar el vehículo, los agentes encontraron al vlogger y a una mujer tailandesa en un acto sexual explícito, sin ninguna clase de discreción.
El ciudadano ruso fue arrestado por violar las leyes de moral pública tailandesas, las cuales penalizan severamente los actos sexuales en espacios públicos. La mujer también fue detenida bajo cargos relacionados con prostitución.
Tras ser trasladado a una comisaría local, Dzugkoev habría admitido su participación en los hechos, aunque rechazó hacer declaraciones ante la prensa. La policía confirmó que el detenido será deportado a Rusia una vez concluidos los trámites legales, debido a que también enfrenta cargos pendientes en su país de origen. Las autoridades no especificaron la naturaleza de dichos cargos.
Georgy Dzugkoev es conocido en redes por su estilo provocador y publicaciones que suelen generar controversia. Su canal ha acumulado cientos de miles de seguidores en plataformas como YouTube y Telegram, donde ha publicado contenido considerado por algunos como ofensivo o desafiante a las normas locales en los países que visita.
El Ministerio de Inmigración tailandés reiteró en un comunicado que no tolerará comportamientos que violen las leyes de orden público y advirtió que los visitantes extranjeros están sujetos a las mismas normas que los ciudadanos locales.
“El turismo es bienvenido, pero el respeto por la cultura y la legislación tailandesa es obligatorio”, señaló un portavoz.
Este caso se suma a una creciente lista de turistas y creadores de contenido que han enfrentado consecuencias legales por comportamientos indebidos en destinos del sudeste asiático, donde las autoridades han endurecido su postura ante delitos vinculados al turismo sexual, escándalos públicos o mal uso de plataformas digitales.
