En las ultimas horas se conoció que unos arqueólogos israelíes, encontraron un huevo de gallina de hace aproximadamente unos 1.000 años de antigüedad, cuando realizaban investigaciones en un pozo de agua residual de esa época.
Este huevo se pudo conservar gracias a que en el lugar donde fue hallado, se consideraba como un pozo séptico humano donde las “secreciones humanas blandas”, permitieron su conservación durante mucho tiempo casi en perfecto estado, pues este tenia un pequeño agujero.
Aunque, se les hace extraño encontrar un huevo con esas características y en ese estado, los investigadores se encuentran sorprendidos pues en la actualidad en las cajas de los supermercados no duran mucho.
Además, por la cantidad de tiempo que el cascaron del huevo estuvo allí era muy complicado no causar daño alguno. No obstante, gracias a un tratamiento que se le bridaron fue “restaurado en una condición completa”.
Asimismo, se conoció que parte de la yema logró ser obtenida y será usada para futuros análisis de ADN, aunque aun no se sabe por qué termino allí, los investigadores celebraron este y otros hallazgos en ese mismo lugar.